Un desastre climático irrumpe arrasando varias comunidades, y un grupo de amistades se une para ayudar como personal de emergencias. Cada una de sus vidas toma diferentes caminos tras el servicio, pero al recordar sus entrenamientos y experiencias - control de inundaciones, seguimiento de epidemias, terapia psicológica tras situaciones traumáticas, o reparaciones de radio - se sienten unides de nuevo. Ahora, enseñan sus habilidades a estudiantes que asisten a los cursos obligatorios de preparación ante emergencias - ¿conseguirán adaptarse a su nuevo rol de mentores, o les costará abrirse con les novatos?
Notas de Investigación #
Hay muchas ideas contenidas en el concepto de un servicio militar, adoctrinamiento, nacionalismo, sacrificio de libertades individuales, discriminación contra identidades queer, encubrimiento de abusos, etc. En vez de pensar en “reconvertir” una unidad militar en una unidad de emergencias (como tratamos el episodio 11 del podcast, La Brigada Contra Incendios), nos centraremos en otro aspecto: la vida tras el servicio.
Imaginemos que tras acabar la educación secundaria, antes de ingresar en una Universidad, cada persona de nuestra sociedad asiste durante 2 años a un curso de entrenamiento y servicio de emergencias climáticas. Sin importar su género, capacidades, etc, a cada persona se le asigna una especialidad y aprenden a ayudar a la comunidad en caso de emergencia. Pueden ser personal de emergencias, personal logístico, personal de cuidados, electricistas, guardabosques, expertes en inundaciones o en coordinación de epidemias… No son profesionales - pueden compaginar otros estudios y trabajos con su entrenamiento climático - pero durante el curso forman parte activa del servicio de emergencias.
Esta educación brinda a la gente unas habilidades que aseguran la ayuda a sus comunidades en caso de catástrofe. Si se necesita ayuda urgente, se hace un llamamiento de personal entrenado, sin importar su vocación actual - bien trabajen en una peluquería, en el mundo de la ingeniería o en política.
Todes eran iguales dentro de su “unidad” climática, y volverán a trabajar al unísono de nuevo, levantando muros de contención contra inundaciones, o lo que toque.
Es importante que esta idea de escritura no se desarrolle durante el entrenamiento inicial, sino años después, cuando el personal de emergencias es movilizado de nuevo.
Tenemos muchas nociones interesantes en términos de worldbuilding:
- Todes han vivido una experiencia similar. Esto les proporciona un grupo de amistades de por vida y más empatía hacia personas muy diferentes, también puede provocar una organización en tribus afines o por pandillas de amigues.
- ¿Diferentes facciones tienen “rivalidades” según la especialidad del grupo de servicio? ¿Brigadistas anti Incendios contra Peronsal técnico de Radio?
- En lugar de ser adoctrinades con patriotismo y nacionalismo, les participantes en el servicio climático comparten un vínculo profundo, al trabajar juntes para salvar vidas y ayudar a personas en peligro. Puede que sobre la mesa choquen las diferentes ideologías de cada persona, pero su experiencia como personal de emergencias les une.
- Como ocurre actualmente con reservistas militares, se les llama para un entrenamiento anual, o cada varios años. Si al comienzo no eran un grupo unido, con el paso del tiempo lo serán.
- ¿Y si hay drama? Si Fulanito le dijo a Menganita que le cae mal, ¿pueden trabajar juntes bajo presión, en una situación de emergencia? ¡Deberían plantearse procedimientos en caso de conflictos dentro del grupo!
- ¿Les integrantes de cada unidad gravitarán hacia vivir en la misma zona, debilitando la estructura social? ¡Los servicios deberían estar repartidos de manera uniforme en cada región!
- En nuestro mundo Solarpunk imaginamos transparencia total, no cabe un “compro el puesto que me conviene”. Todo el mundo se especializa según sus capacidades y limitaciones, y se trata a todes como iguales.
- ¿Cómo es un llamamiento? ¿Qué ocurre si alguien está enferme, embarazade o no puede abandonar su puesto de trabajo rápidamente - por ejemplo en una central eléctrica?
- Desde un punto de vista emocional: cómo se lleva a cabo una movilización? ¿Es emocionante para les participantes? “Me voy con mis amigues a salvarle el culo a la gente!” ¿Qué otro tipo de reacciones y emociones puede causar?
Aunque esta semilla tiene muchos puntos para explicar e investigar, la historia sería divertida de escribir y de leer. Tiene acción, dramatismo, emoción, y está llena de potenciales “flashbacks” a otros momentos más cotidianos de una realidad Solarpunk.
Participantes o Voluntaries #
Esta idea puede ir en dos direcciones, y ambas me parecen igual de interesantes. La primera es que el servicio de emergencias climáticas obligatorio no sea de agrado para todes, pudiendo verse como algo “demasiado autoritario”, mientras que la segunda opción es un voluntariado, que asume que la gente siente la necesidad de entrenarse por su cuenta (como por ejemplo en Islandia https://en.wikipedia.org/wiki/Icelandic_Association_for_Search_and_Rescue o voluntaries contra incendios).
El centro de este concepto es imaginar a personas que llevan sus propias vidas normales, hasta que son llamades a actuar en una emergencia - además de las dinámicas sociales dentro del grupo. El voluntariado es una opción funcional hoy en día y puede permitir al público de la historia imaginar esa realidad, pero el cambio cultural que supone compartir una experiencia de educación climática es interesante también.
Relevo generacional #
Un aspecto interesante de esta historia puede ser observar el primer año o generación de la educación de reservistas, y cómo el programa se puede sentir opresivo o extraño - en contraposición con otras escenas 20 años después, donde está normalizado y todes comparten las tareas y responsabilidades del servicio climático.